"El médico decidió que había llegado el momento de decirle al paciente la verdad: «Creo que es mi deber decirle que está usted muy enfermo y que no es probable que viva más de uno o dos días. Debería usted poner en orden sus asuntos. ¿Hay alguien a quien desearía ver?»
"Sí», le respondió el paciente con un hilo de voz.
“¿A quién?», preguntó el médico.
"A otro médico.»
Anthony De Mello
***
31.Detente con frecuencia, aunque sea un instante, antes de cualquier actividad o en medio de ella, para tomar conciencia de la presencia del Señor y adorarle en cada momento.
32.Haz de la Misa el centro de tu jornada. Prepárala y concentra en ella lo mejor de ti mismo.
33.Después de la comunión y de la Misa cuida especialmente el recogimiento para que la gracia que has recibido dé todo su fruto.
34.Aprovecha el silencio de la noche para gozar de una especial intimidad con el Señor. Sé el vigía que vela en la gozosa esperanza del amanecer definitivo y eterno de Cristo.
35.Nunca pierdas la paz. No te inquietes ni te apresures por nada. Pon orden en tu vida y haz todo con serenidad, hasta los gestos más sencillos y ordinarios. Sólo así se abrirá en tu interior la fuente del silencio.
Fundamentos-Contemplativos en el mundo
No hay comentarios:
Publicar un comentario