"Dos presuntos compradores andaban mirando los vehículos puestos a la venta en una exposición de coches usados.
Se les acerca un dependiente y empieza a soltarles el pertinente rollo; entonces uno de ellos le enseña una cartulina donde dice: «Lo sentimos, pero somos sordomudos».
El dependiente saca una libreta y les explica por escrito las innumerables ventajas de cualquier coche por el que ellos manifiestan tener algún interés.
Finalmente, se deciden por un pequeño y bien conservado Volkswagen.
Se suben a él para probarlo, dan una vuelta a la manzana y parecen tan complacidos que se diría que la venta ya está hecha.
Pero, al regresar junto al vendedor, ambos menean la cabeza con énfasis dando a entender que no les convence.
El vendedor escribe a toda prisa en la libreta: «¿Por qué? ¿Qué es lo que no les gusta?»
Uno de ellos toma la libreta y escribe: «¡No tiene radio!»