"Un pecador público fue excomulgado y se le prohibió entrar en la iglesia.
Entonces le presentó sus quejas a Dios: “No quieren dejarme entrar, Señor, porque soy un pecador...”
“¿Y de qué te quejas?”, le dijo Dios. “Tampoco a mí me dejan entrar”.
Anthony De Mello
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"Todo esto lo podemos aplicar de manera especial cuando recibimos un llamamiento a la intercesión en concreto, cuando Dios nos descubre su anhelo de salvación y nos muestra con fuerza una necesidad determinada y nos hace saber que nos llama a hacer posible su acción eficaz e infalible.
En ese sentido tenemos una singular responsabilidad porque sabemos que está asegurada la gracia y el éxito de la empresa, con tal de que seamos fieles a nuestra misión de intercesión.
Estos casos revisten una peculiar importancia dentro del ministerio de la intercesión.»
En ese sentido tenemos una singular responsabilidad porque sabemos que está asegurada la gracia y el éxito de la empresa, con tal de que seamos fieles a nuestra misión de intercesión.
Estos casos revisten una peculiar importancia dentro del ministerio de la intercesión.»
Fundamentos-Contemplativos en el mundo
"Tampoco a mí me dejan entrar".
ResponderEliminarFUERTE y DIRECTO.
Tal cual. Anthony De Mello es mordaz, pero las cosas que dice son reales. FUERTE Y DIRECTO!!
EliminarPermiso Blanca, lo descubrí en Facebook y me nace comentar. Hermoso texto de A. de Mello y la reflexión acompaña a comprender.Gracias.
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